Noticias

Qué aprendimos de Barbie sobre mujeres y matemáticas

13/02/2007

ANN ARBOR, Michigan — Como si escuchar al discurso típico de la muñeca Barbie “Las matemáticas son difíciles,” para las mujeres jóvenes, cuya identidad sexual es central a su identidad general, tienen un rendimiento más deficiente en matemáticas.

Según un nuevo estudio realizado con estudiantes universitarios, las mujeres con una identidad sexual central al concepto que tenían sobre sí mismas y que también creían en el estereotipo de que las mujeres rinden menos en matemáticas, rindieron peor en un curso de introducción al cálculo que otras jóvenes menos identificadas con su feminidad y que no mostraron evidencia de creer en estereotipos inconscientes o implícitos.

El rendimiento en las matemáticas sufrió incluso aún cuando las mujeres rechazaron explícitamente la noción de que los hombres son mejores en las matemáticas que las mujeres, según los investigadores.

El estudio, realizado por las psicólogas Amy K. Kiefer de la Universidad de California, en San Francisco, y Denise Sekaquaptewa en la Universidad de Michigan, fue publicada en le edición de enero de la revista Psychological Science, publicada por la Asociación de Ciencias Psicológicas.

Para determinar la presencia implícita de estereotipos, los investigadores mostraron a los participantes del estudio un listado de palabras para medir el tiempo de reacción al emparejar las palabras. Las pruebas de tener estereotipos implícitos incluyen vincular palabras como “él” más rápidamente que “ella” a conceptos matemáticos como “calcula” y “cálculo,” por ejemplo. Para participantes con estereotipos implícitos, palabras femeninas fueron aparejadas más rápidamente con artes y humanidades y conceptos como “Inglés” y “clásicos”.

Según Sekaquaptewa, que es miembro del Departamento de Psicología de la UM y profesora asociada del Instituto de Investigación Social (En ingles, Institute for Social Research, ISR) de la misma Universidad, las mujeres que convinieron más fuertemente a que su feminidad era central a su identidad y que también mostraron tener estereotipos implícitos de su sexo rindieron peor en el examen final y tenían menos posibilidades de elegir una carrera relacionada con matemáticas.

“Esto fue incluso verdad cuando controlamos para los puntajes de matemáticas de la Prueba de Aptitud Escolar (En Inglés, SAT) y el rendimiento anterior en la clase de cálculo,” dijo.

La mayoría de las mujeres en el estudio discreparon con la idea de que los hombres tienen una capacidad superior en las matemáticas, advierten los investigadores. Sin embargo, aún cuando las mujeres rechazaron explícitamente este estereotipo, la velocidad con la cual vincularon “varón” y “matemáticas” indica, que muchas ligan los dos conceptos.

Según las autoras, esta investigación puede proporcionar más conocimientos sobre las causas por las porque aún las mujeres muestran menos posibilidades que los hombres de entrar a profesiones matemáticas fuertes en matemáticas o ciencias de computación.

“Es la combinación de aceptar la identidad femenina, que la sociedad anima a las mujeres sostener la creencia de que las matemáticas son para los hombres aunque esas creencias no sean expresadas concientemente,” dice Sekaquaptewa. “Estas creencias implícitas permanecen, como un residuo de mensajes con estereotipos a los que las mujeres estuvieron expuestas cuando crecían”.

La investigación fue apoyada por un subsidio del Instituto de Investigación sobre Mujer y Género.

El Instituto de Investigación Social (Institute for Social Research, ISR) se fundó en el año 1948 y es una de las organizaciones más antiguas del mundo en la investigación de sondeos de opinión. El ISR es uno de los líderes mundiales en el desarrollo y aplicación de metodologías de Ciencias Sociales. El ISR realiza estudios que son ampliamente citados en el país e internacionalmente, incluidos los Sondeos de opinión de Actitudes del Consumidor y Estudios sobre elecciones nacionales en EEUU, entre otros. Para más información sobre el ISR, visite: www.isr.umich.edu

Contacto: Diane Swanbrow

Teléfono: (734) 647-4416