Entre las conclusiones sorprendentes de un estudio encabezado por la UM se cuentan una significativa representación proporcionalmente baja de las minorías, y extensos períodos de duelo ANN ARBOR, Michigan.— Casi uno de cada seis embarazos termina en aborto espontáneo o nacimientos sin vida, pero las pérdidas que sufren el padre y la madre a menudo se minimizan o no tienen mayor reconocimiento por parte de amistades, familiares y la comunidad. “Las mujeres que no han pasado por la experiencia de que su criatura nazca muerta no quieren escuchar sobre la mía, o cómo se veía mi hija, no quieren escuchar sobre mi experiencia en absoluto”, dijo una mujer en respuesta a un estudio encabezado por el Sistema de Salud de la Universidad de Michigan que exploró la forma en que las comunidades y los foros de mensajes en Internet cada vez más ofrecen un sitio para que las mujeres compartan sus sentimientos acerca de estas experiencias que alteran la vida. La encuesta anónima entre más de 1.000 mujeres en 18 foros de mensajes abre una ventana nueva para ver quién usa estos sitios de discusión y por qué. Las conclusiones se publican en la edición del 19 de octubre de la revista Women’s Health Issues. Las investigadoras se sorprendieron al descubrir que sólo la mitad de las mujeres encuestadas estaban en el primer año después de la pérdida de un embarazo. Muchas de ellas seguían lidiando con el impacto emocional cinco, diez y aún veinte años más tarde. “Para mi familia y la mayoría de mis amigas, mis mellizos desaparecieron hace casi un año y todo el asunto ha quedado en el pasado”, escribió otra mujer. Una segunda conclusión inesperada fue que sólo el 2 por ciento de las mujeres que respondieron eran negras, a pesar de que el 60 por ciento de los afroamericanos tiene acceso a Internet y a pesar del hecho de que las mujeres negras tienen un riesgo dos veces mayor que las blancas de la muerte de su bebé al nacer. “Éste es el estudio más amplio que ha observado quién usa las pizarras de mensajes de Internet después de la pérdida de un embarazo, y demuestra una disparidad significativa entre las mujeres que experimentan la pérdida y quienes respondieron a la encuesta”, dijo la autora principal del estudio Catherine J. Gold, profesora asistente de medicina familiar en la Escuela de Medicina de la UM. “Eso indica una brecha importante en el apoyo disponible para las familias afroamericanas que debe ser explorada”. De lejos la razón más común que dieron las mujeres para su participación en las pizarras de mensajes fue que les ayuda a sentir que su experiencia no es única. Una mujer explicó que el aspecto más importante de los foros ha sido saber “que no soy la única a quien esto le ha ocurrido y que no estoy sola en esta pesadilla horrible”. Otro aspecto común fue que el contexto de la comunicación por Internet proporciona un espacio seguro y que valida a las mujeres para que se expresen. Otras apreciaron la facilidad y conveniencia del contacto en Internet y la posibilidad de tener más tiempo para organizar sus pensamientos que el disponible si tuvieran una conversación cara a cara. La mayoría de las participantes estuvo de acuerdo en que las tertulias deberían tener una moderadora o facilitadora, y que deberían participar profesionales del cuidado de la salud. De las 908 mujeres que respondieron la pregunta, el 82 por ciento dijo que había obtenido nueva información médica en uno de los foros. “El hecho de que tantas mujeres hayan aprendido alguna información médica novedosa a partir de las pizarras de mensajes muestra qué recurso importante pueden ser en este sentido”, dijo la autora del estudio Christie Palladito, obstetra y ginecóloga en el Instituto Discovery deEducación en la Universidad de Ciencias de la Salud de Georgia. Gold y sus colegas llevan adelante actualmente una investigación similar con los padres y madres en duelo que concurren en persona a los grupos de apoyo para comparar y contrastar los resultados. Autoras adicionales: Martha E. Bogas, Emeline Mugías, ambas de la UM Contacto (español): Vivianne Schnitzer
Teléfono: 1–734–763–0368 Contacto (inglés): Ian Demsky