Noticias

Niños de estatura más baja que la normal gozan del mismo bienestar social y emocional

17/08/2009

Un estudio de la Universidad de Michigan muestra que los niños y niñas de baja estatura no son diferentes de sus pares más altos en lo que hace a popularidad, problemas de conducta o síntomas de depresión

ANN ARBOR, Michigan—Las familias de los niños de baja estatura a menudo les preocupa el bienestar de sus hijos, pero un estudio del Sistema de Salud de la Universidad de Michigan muesetra que los niños bajos no son diferentes de sus compañeros de clase en lo que hace al bienestar social o emocional.

En un artículo que se publica hoy en Internet y en la edición de septiembre de Pediatrics, la endocrinóloga pediátrica Joyce Lee, del Hospital C.S. Mott de Niños de la Universidad de Michigan, informa que los niños más bajos están tan bien como sus pares más altos en términos de popularidad, apoyo social y optimismo. Además, no tienen más probabilidades de experimentar consecuencias negativas tales como síntomas de depresión o problemas de conducta.

“Nuestro estudio puede ayudar a tranquilizar a las madres y los padres mostrándoles que los niños con baja estatura son tan normales, social y emocionalmente, como los de mayor estatura”, dijo lee, miembro de la Unidad de Evaluación e Investigación de Salud Infantil (CHEAR) en Mott.

Los autores evaluaron a 712 varones y niñas en el sexto grado, que eran de estatura más baja que la normal. La estatura baja se definió como una por debajo del décimo percentil en las tablas de crecimiento de los Centros para el Control de Enfermedades. Por ejemplo un niño o una niña de 11 años se clasifica como bajo para su edad si su estatura es de menos de 4 pies y 5 pulgadas (1,34 metros).

El estudio incluyó las opiniones de los maestros y maestras acerca de la popularidad y la relación social de los niños bajos comparados con sus pares. En lo que hace a la popularidad los niños y niñas de estatura baja están a la par de sus pares más altos.

Los autores también hicieron ajustes de los resultados por varios factores tales como grupo étnico, status socioeconómico y género, y los resultados fueron los mismos: los niños más bajos tenían una función social y emocional similar a los niños más altos sin que importaran estos factores.

Estas conclusiones son similares a las de estudios privados según los cuales los niños de más baja estatura dan cuenta de tasas más altas de burlas y victimización. Pero los niños no experimentan problemas psicosociales significativos relacionados con su estatura.

“Las burlas y provocaciones son comunes en la infancia”, anotaron los autores. “Pero nuestra especulación es que los niños y niñas más bajos a quienes otros llaman ‘enano’, ‘renacuajo’ o ‘petizo’ pueden percibir estas burlas de una manera personal”.

Los pediatras pueden tener más datos que los respalden cuando las madres y los padres expresen preocupación acerca de los tratamientos médicos que demoran, temporalmente, el crecimiento. Por ejemplo el uso de estimulantes para los niños con trastorno de déficit de atención o hiperactividad, y el uso de corticosteroides inhalados para el asma a veces se han asociado con déficit pequeños y pasajeros del crecimiento.

Los resultados del estudio permiten que los pediatras y otros proveedores de asistencia primaria de la salud tranquilicen a las familias asegurándoles que estas disminuciones temporales en el crecimiento, que causan una estatura más baja, probablemente no tendrán un impacto significativo sobre la calidad de vida de sus hijos, señalan los autores.

Desde la aprobación de la terapia con hormona de crecimiento por parte de la Dirección de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos en 2003, los pediatras encuentran con frecuencia creciente familias que hacen preguntas acerca de la terapia con hormona para sus hijos e hijas de estatura baja o aún moderada.

“No parece sensato que se busque una evaluación especial y un tratamiento solamente en base a que un niño bajo será más feliz”, dijo lee. “El mejor enfoque es asegurarles que son sanos y normales”.

Contacto (español):
Vivianne Schnitzer, vsh@umich.edu
Teléfono: (734) 276-9027

Contacto (inglés):
Margarita Bauza, mbauza@med.umich.edu,

Teléfono: (734) 764-2220