El compuesto sensibiliza las células resistentes lo cual permite dosis más bajas de quimioterapia

ANN ARBOR, Michigan.—Una de las razones por las cuales fallan los tratamientos del cáncer de cabeza y cuello es que las células del tumor se tornan resistentes a los compuestos en la quimioterapia. Ahora los investigadores del Centro Integral del Cáncer, de la Universidad de Michigan, han descubierto que un compuesto derivado de la especia india curcumina puede ayudar a que las células superen esa resistencia.

Cuando los investigadores añadieron un compuesto sobre base de curcumina, llamado FLLL32, a las líneas de células de cáncer de cabeza y cuello, pudieron reducir a una cuarta parte la dosis del compuesto cisplatin de la quimioterapia manteniendo la misma tasa de eliminación de las células de cáncer lograda con la dosis más alta de cisplatin sin el FLLL32.

El estudio se publica esta semana en la revista Archives of Otolaryngology.

“Esto abre la posibilidad de usar dosis más bajas y menos tóxicas de cisplatin logrando una eliminación equivalente, o aún mayor, del tumor. Típicamente, cuando las células se tornan resistentes al cisplatin tenemos que administrarlo en dosis cada vez mayores. Pero este compuesto es tan tóxico que los pacientes que sobreviven al tratamiento a menudo experimentan efectos secundarios del tratamiento por largo plazo”, dijo el autor principal del estudio Thomas Carey, profesor de otolaringología y farmacología en la Escuela de Medicina de la UM y co-director del Programa de Oncología de Cabeza y Cuello en el Centro Integral del Cáncer de la UM.

La resistencia que desarrollan los tumores al cisplatin es una de las razones principales por las cuales los pacientes con cáncer de cabeza y cuello a menudo ven que el cáncer retorna o se propaga. Esa resistencia también es una razón importante por la cual la supervivencia de cinco años para los pacientes con cáncer de cabeza y cuello no ha mejorado en tres décadas.

El FLLL32 se ha diseñado para sensibilizar las células de cáncer, en el nivel molecular, a los efectos del cisplatin contra el tumor. El compuesto actúa sobre un nuevo tipo importante de proteína llamada STAT3 que se encuentra en altos niveles en alrededor del 82 por ciento de los cánceres de cabeza y cuello. Los altos niveles de STAT3 aparecen vinculados con problemas en los procesos de muerte de las células normales, lo cual permite que las células cancerosas sobrevivan a la quimioterapia. La activación de la STAT3 se ha asociado con la resistencia al cisplatin en el cáncer de cabeza y cuello.

Se sabe que la curcumina inhibe la función de la STAT3 pero no es bien absorbida por el cuerpo. El FLLL32 lo desarrollaron investigadores de la Universidad estatal de Ohio para que sea más adecuado al uso con personas. El estudio actual usó el compuesto solamente en líneas de células en el laboratorio.

En este estudio los investigadores compararon varias dosis de cisplatin solo, con varias dosis de cisplatin administrado junto con el FLLL32 en dos conjuntos de células de cáncer de cabeza y cuello: una línea sensible al cisplatin y la otra que era resistente.

Los científicos determinaron que el FLLL32 disminuyó los niveles de activación de la STAT3 sensibilizando tanto las células de tumor resistentes al cisplatin como las que eran sensibles a él. Además encontraron que las dosis más bajas de cisplatin combinadas con FLLL32 eran igualmente eficaces que las dosis más altas de cisplatin solo en la eliminación de células cancerosas.

Otros estudios separados indican que el cuerpo quizá no absorba bien el FLLL32 y los investigadores desarrollan un compuesto de nueva generación que, esperan, mejorará en este aspecto. El equipo de la UM planifica continuar el estudio de este nuevo compuesto como parte potencial del tratamiento del cáncer de cabeza y cuello. Actualmente no hay disponibles pruebas clínicas con el uso de este compuesto.

Estadísticas del cáncer de cabeza y cuello: Unas 36.650 personas en Estados Unidos recibirán este año un diagnóstico de cáncer de cabeza y cuello y unas 7.880 morirán por esa enfermedad, según la Sociedad Estadounidense del Cáncer.

Autores adicionales: Waleed M. Abuzeid, Samantha Davis, Alice L. Tang, Lindsay Saunders, J. Chadwick Brenner, Emily Light, Carol R. Bradford, y Mark E.P. Prince, todos de la UM; Jiayuh Lin, del Hospital Nationwide de Niños en Columbus, Ohio; y James R. Fuchs de la Universidad esetatal de Ohio.

Financiación: Instituto Nacional de Investigación Dental y Craniofacial; donación del Programa de Excelencia en Investigación Especializado en Cabeza y Cuello (SPORE), Instituto Nacional del Cáncer, Sociedad Estadounidense del Cáncer.

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