- Implementando “horas tranquilas” durante el día y la noche para proveer a los pacientes una oportunidad de descansar.
- Colocando instrumentos que muestren los niveles de sonido en algunas habitaciones.
- Estableciendo horas de silencio en todas las áreas de hospitalización.
- Proporcionando gratuitamente tapones de oído para los pacientes y sus familias.
- Manteniendo las conversaciones en los pasillos al mínimo, especialmente por la noche.
- Recomendando a los a los pacientes y al personal a respetar a los demás bajando el volumen en los teléfonos celulares, televisores, radios, localizadores y otros dispositivos
- Minimizando las conversaciones de teléfonos celulares en los pasillos del hospital y salas de espera y animar a otros a hacer lo mismo.
- Configurando los buscapersonas para vibrar cuando sea médicamente apropiado.
- Atenuando luces en habitaciones de los pacientes y los pasillos de la unidad.
- Coordinando la atención con el fin de reducir la entrada innecesaria en las habitaciones de los pacientes durante las horas tranquilas.
- Recordando al personal de usar voces tranquilas en el ámbito de la atención del paciente.
- Proporcionando un canal de “ruido blanco” en la televisión en todas las habitaciones de los pacientes.
- El uso de zapatos de suela suave para minimizar el ruido en los pasillos.
- La colocación de las órdenes de trabajo a través de un sistema dedicado para tener carros ruidosos, puertas y otros elementos reparados.
- Programando la limpieza para cuando no esté en conflicto con las horas de descanso nocturno de limpieza.
ANN ARBOR, Mich.- Monitores. Camillas y sillas de ruedas que rechinan. Buscapersonas que no dejan de sonar. Una de las quejas más comunes entre pacientes de hospitales es que hay tanto ruido que es casi imposible dormir profundamente, lo que dificulta su pronta recuperación.
Es por ello que el Sistema de Salud de la Universidad de Michigan (UMHS por sus siglas en inglés) está experimentando diferentes métodos para bajar los niveles de ruido en el hospital.
De acuerdo al estudio piloto, publicado en BMJ Quality and Safety, investigadores de U-M situaron estratégicamente paneles acústicos de sonido, cubiertos de conos y hechos con material fonoabsorbente, en los pasillos, paredes y techos alrededor de las habitaciones de los pacientes en la unidad de atención cardiovascular.
El hospital era un poco más tranquilo con 57 decibelios comparado con los 60 decibelios antes del piloto.
Aunque la caída de ruido fue modesta, entre 3-4 decibelios, es reconocible para el oído humano y consistente con una caída en el ruido generado por un coche yendo de 80 mph a 60 mph.
“En entornos hospitalarios donde los niveles de ruido son a menudo el doble de los que recomienda la Organización Mundial de la Salud para habitaciones de pacientes, la diferencia es significativa”, dijo Majtaba Navváb, Ph.D., profesor asociado en la Facultad Taubman de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Michigan.
En el estudio, Navváb se asoció con Arquitectura, Ingeniería y Construcción, que planifica los espacios en los tres campus de la U-M, y colaboró con los médicos Pedro M. Farrehi, y Brahmajee K. Nallamothu.
“Este diseño arquitectónico podría complementar las estrategias ya en curso para abordar el problema del ruido”, dijo Farrehi, el autor principal del estudio, cardiólogo en el Sistema de Salud de la U-M. “Los paneles ayudan a tener un sonido difuso, en lugar de intentar eliminar los sonidos generados en un ambiente de hospital”.
El lado negativo de ruido
Investigaciones revelan que un ambiente ruidoso no sólo hace que los pacientes estén descontentos – también puede producir incrementos rápidos en la presión arterial e interferir con la cicatrización de heridas y el manejo del dolor. También afecta a quienes trabajan con y cerca de los pacientes.
De hecho, estudios han demostrado una correlación directa entre los niveles de decibelios de sonido en ambientes de trabajo y los niveles de presión arterial frecuencia cardiaca de los pacientes.
A nivel nacional, los pacientes han dado malas calificaciones a los hospitales debido al ruido de los hospitales en la Evaluación Nacional de Hospitales de Proveedores y Sistemas de Salud (HCAHPS), una encuesta para determinar la calidad de atención en los hospitales. Esos resultados pueden afectar el reembolso hospital ya que los pacientes que no están satisfechos con el nivel de ruido en sus habitaciones están a menudo desconforme con su experiencia general en el hospital.
Promoviendo una cultura de silencio
Para reducir el ruido del hospital, los Hospitales y Centros de Salud de la U-M están utilizando varias estrategias, incluyendo: