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Como hablarle a sus hijos sobre el coronavirus

13/03/2020

Un psicólogo pediátrico ofrece cinco consejos para los padres sobre cómo hablar de la pandemia con sus hijos.

Las escuelas están cerrando, las vacaciones familiares han sido pospuestas y los juegos deportivos se están cancelando. Mientras que esta pandemia viral puede sentirse abrumadora para los adultos, imagina lo que se siente para los niños.  

A medida que los ciclos de noticias y las conversaciones diarias de los adultos continúan girando en torno a la siempre cambiante pandemia COVID-19, se alienta a los padres a que se comuniquen regularmente con sus hijos para ver cómo están procesando la información que han escuchado y lidiando con los muchos cambios que ocurren a su alrededor, dice la Dra. Melissa Cousino, psicóloga pediátrica del Hospital Infantil C.S. Mott.

Aunque pueda preocuparle que plantear el tema pueda hacer más daño que bien, en realidad, evitar tales discusiones puede dejar a su hijo más asustado, explica Cousino.

“Los niños suelen ser muy observadores. Aunque es comprensible que tratemos de protegerlos de realidades aterradoras, el no abordar la situación podría aumentar sus temores de manera inadvertida”, explica.

Si no está seguro de cómo iniciar la conversación, Cousino ofrece estos cinco consejos para ayudar a guiar su conversación:

1. Utilice un lenguaje apropiado para el desarrollo, simple y honesto.

COVID-19 y su impacto global puede ser un concepto complejo de entender, especialmente para los niños. Lo que es desconocido o mal entendido puede incitar al pánico.

Es importante explicar la situación a los niños de una manera simple, pero honesta. 

“Se podría decir algo como: ‘hay un germen muy fuerte, llamado virus, que se propaga rápidamente y hace que algunas personas se enferman'”, dice Cousino. “Podrías explicar que es como tener un resfriado o una infección de estómago, pero que hace que algunas personas se enfermen más, por lo que todos estamos trabajando juntos como comunidad para detenerlo”.

2. Ofrezca una tranquilidad razonable. 

Los niños buscan a los padres y a los adultos en sus vidas para mantenerlos seguros. La información errónea es peligrosa para todos. Los padres deben usar fuentes confiables, como la página COVID-19 del CDC, para guiar su propia entrega de información. 

Cousino dice: “También puede ser útil explicar a los niños lo que se está haciendo para mantenerlos a ellos y a otros tan seguros como sea posible, como lavarse las manos extra y mantenerse alejados de grandes multitudes”. Los niños deben saber que muchas personas están trabajando duro juntas para detener, tratar y curar el virus”.

3. Sigue su ejemplo y valida sus sentimientos. 

Proporcione un espacio para que su hijo haga preguntas o exprese sus preocupaciones. Puede que no quieran hablar de ello o que se sientan abrumados con una de sus respuestas a una pregunta, y eso es una señal para volver a tratar el tema en otro momento. Usted es quien mejor conoce a su hijo: si tiende a querer procesar la información por sí mismo, siga su ejemplo.

Si usted mismo tiene sentimientos sobre COVID-19, está bien compartirlos con sus hijos de una manera apropiada para su desarrollo. 

“Esto valida sus sentimientos y ofrece oportunidades para que los padres modelen el uso de las habilidades de afrontamiento”, dice Cousino. “Por ejemplo, cuando su hijo expresa tristeza por un cambio importante o un evento cancelado, está bien decir que usted también se siente triste. Haga un seguimiento con algo que le ayude a sentirse mejor cuando esté triste, como leer un libro o jugar un juego divertido”.  

4. Trae algo de control y diversión donde puedas. 

Según Cousino, los niños, al igual que los adultos, van a buscar el control en situaciones que parecen incontrolables. Dales maneras de afirmar el control. “Hágalos encargados del desinfectante de manos cuando la gente entre y salga de la casa, o encarguélos de determinar una ‘canción del día’ para el lavado de manos”, dice. 

En otras áreas de la vida no relacionadas con la prevención de infecciones, déle oportunidades a los niños para que también ejerzan el control. “Deje que su hijo escoja la película para la noche de cine o qué cenar. Con todos nosotros probablemente pasando más tiempo en casa, haga que sus hijos le ayuden a hacer planes o un horario para el día”.

5. Tómate un tiempo para ti mismo para entender tus propios sentimientos

Es normal sentirse ansioso, enojado o decepcionado. Es una situación que cambia constantemente y que afecta a nuestra salud, economía, vida social y rutinas diarias. Cousino insta a todos a que practiquen el autocuidado, aunque sólo sea por unos minutos al día. “Los niños nos mirarán para saber cómo responder y actuar, pero nosotros, por supuesto, también tenemos miedos y decepciones. Encuentra lo que funciona para ti. Puede ser una llamada telefónica a un amigo para mantenerse conectado o un paseo con tiempo lejos de los medios sociales y las noticias. No podemos cuidar de nuestros hijos si no nos cuidamos a nosotros mismos”.   

Kim Morales es una estudiante de gestión deportiva en la Universidad de Michigan. Además de sus estudios dedica su tiempo libre en la organización estudiantil La Casa.

 

 

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