Luisa Sánchez una estudiante de ciencias políticas y estudios latinos/as en la Universidad de Michigan.
ANN ARBOR– Resaltando el “capital cultural” latino, la recopilación de nuestras experiencias y aprendizajes individuales que compartimos como comunidad y que nos permiten crecer y prosperar, Michelle Ferrez dio apertura al Mes de la Herencia Latina este año en la Universidad de Michigan.
“Aportamos capital, aportamos bienes, y eso viene de nuestra familia, nuestros conocimientos, nuestras habilidades, nuestras capacidades, y eso surge de nuestros ancestros”, dijo Ferrez, la directora del Undergraduate Research Opportunity Program (UROP) de la U-M. “Parte de nuestra cultura es el relato de historias. No podemos perder de vista nuestras luchas compartidas en nuestra comunidad, ni nuestras luchas individuales.”
Más de 150 estudiantes, profesores y personal, vacunados y con mascarillas, se reunieron en el Rogel Ballroom del Michigan Union para celebrar el lanzamiento del Mes de la Herencia Hispana en la primera celebración a gran escala para los estudiantes desde el comienzo de la pandemia. Cada plato servido y cada orador tenía una historia para impartir, una historia representativa de sus raíces.
Miriam Nicolda Palacio, una chef afrolatina de Panamá, preparó cerdo guisado, arroz con coco y gandules, y patacones. “Lo usamos más los domingos. Lo llamamos dominguera”, dijo mientras pasaba con facilidad de hablar inglés a español. “La comida de la costa tiene muchas influencias caribeñas. Te invito a Panamá para que veas cómo es”.
Luz Ruiz, una chef colombiana, hizo empanadas con queso dulce y con pollo, también preparó arepas, las cuales dijo que son muy populares en su país. Para compartir ese sabor único con una mayor cantidad de personas, sustituyó la harina de maíz, que normalmente se utiliza para hacer las empanadas, por yuca, lo que hace que el plato sea libre de gluten.
Los organizadores explicaron que la incorporación de la comida latinoamericana en el menú y la inclusión de los chefs con sus historias y culturas en el programa, contribuye a que los estudiantes no se olviden de sus raíces, ni de la diversidad de tradiciones y culturas que forman la comunidad Latinx de la U-M.
“Queríamos que esto fuera una celebración de nuestros logros, sin embargo también queríamos reconocer que este año pasado fue difícil. Queríamos reconocer estos retos que nos han convertido en lo que somos hoy”, dijo Anamaria López, una organizadora de las actividades del Mes de la Herencia Latina en el campus y estudiante de posgrado en la Escuela de Educación. “Aquí es donde surgió la idea de las raíces, porque nos guste o no, estas raíces son ahora parte de nosotros, y de estas raíces florecemos”.
Durante su discurso, Ferrez contó sus experiencias como activista, lo que la impulsó a convertirse en agente institucional, abogando por los estudiantes BIPOC.
Fue a través de su tiempo como estudiante de pregrado en la UCLA que se dio cuenta de cómo los profesores y el personal son capaces de dar apoyo auténtico y genuino a los estudiantes, dijo. Aunque tradicionalmente se considera que las familias establecen sus raíces en los hijos, Ferrez planteó la idea de que la familia se manifiesta de distintas formas.
“La familia no necesariamente tiene que ser de sangre. La familia puede ser de amistad. La familia puede ser una persona que simplemente te cuida”.
El apoyo de esa familia que había establecido entre compañeros, profesores, personal y mentores la llevó a protestar contra las injusticias que veía en su comunidad y en el campus. Cuando Ferrez y 260 estudiantes más, fueron detenidos, no quedaron solos, ni ella fue rechazada por la familia que había establecido. Esa fue una gran razón por la cual siguió luchando por buenas causas.
“Necesitamos que todos ustedes con su capital luchen”, declaró Ferrez, “por la justicia social no sólo en nuestras comunidades en los Estados Unidos, sino en nuestros países de origen, en toda América Latina, en toda América Central y en todas las islas del Caribe.”
Durante el evento, los oradores también destacaron las contribuciones de la comunidad latinx a la U-M en su totalidad.
“Sus contribuciones y sus legados no pueden ser totalmente conmemorados en un solo mes del año, pero este mes es un gran momento para tomar una pausa y reflexionar”, dijo Martino Harmon, Vicepresidente de Vida Estudiantil. “La Universidad de Michigan no sería lo que es hoy sin las contribuciones de la comunidad latina”.
https://mesa.umich.edu/Latinx-Heritage-Month
Luisa Sánchez es una estudiante de ciencias políticas y estudios latinos/as en la Universidad de Michigan.